OPINION
El TC: bien, pero a medias
JOSÉ MARIA BRUNET
EL TC HA HECHO LO debido con la puesta en libertad del ex senador Sala. Lo
debido, porque la propia doctrina del Tribunal en precedentes similares le
obligaba a actuar así, como en su día informó el fiscal. Y también porque la
condena de Sala tiene una base tan estrecha, que apenas se sostiene, sobre
todo en lo que se refiere al delito de asociación ilícita, cuya apreciación
en este caso roza la aberración jurídica, dicho sea con todo respeto hacia
el Supremo. Sin embargo, el auto del TC es en cierta medida decepcionante
porque ha necesitado aparentemente diez días para decir obviedades. Hace
diez días que el fiscal informó a favor de la libertad de Sala. Si se ha
dejado pasar ese tiempo, parece que debería ser para elaborar un auto muy
enjundioso. Pero luego resulta que no, que se dice lo de siempre en estos
casos. ¿Para qué esperar, pues? Todo indica que la dilación se ha debido al
interés en resolver el caso de Sala junto al de Navarro, mucho más complejo,
como lo demuestra la existencia de un voto particular. El TC debe actuar con
mayor celeridad y profundidad, precisamente en bien de su prestigio, ganado
a pulso por su eficaz labor en defensa de la Constitución.
Copyright La Vanguardia 1997