DECLARACION DEL SENADOR JOSÉ MARÍA SALA SOBRE LA SENTENCIA DEL
TRIBUNAL SUPREMO (28 de octubre de 1997)
Conocida la sentencia de la Sala Segunda del Tribunal Supremo sobre el llamado "caso Filesa", quiero hacer pública la seguiente declaración:
Desde el inicio en 1991 de las actuaciones judiciales sobre el "caso Filesa", he manifestado mi más absoluta inocencia. Inocencia que hoy reitero: no he tenido nada que ver con una presunta financiación irregular del PSOE, ni he cometido ningún delito o ilegalidad.
A pesar de ello, se me condena a una pena de un año de prisión menor y multa de cien mil pesetas por un delito de falsedad en documento mercantil cometido en 1988, la autoría del cual se me atribuye, y a una pena de dos años de prisión menor, seis años y un día de inhabilitación especial como cargo público, derecho de sufragio activo y pasivo, y multa de doscientas cincuenta mil pesetas por un delito de asociación ilícita.
Por lo que se refiere a la falsedad en una factura emitida el año 1988 por la empresa Time Export, debo decir que nadie, incluyendo el principal testigo de cargo, me atribuye ningún tipo de participación en la gestión de esta empresa, no habiéndose manifestado ni siquiera conocimiento de mi persona por parte de los empleados, administradores o proveedores de la misma.
Por lo que se refiere al delito de asociación ilícita, debo decir que esta figura delictiva se ha utilizado hasta hoy sólo para calificar delitos de terrorismo y que su aplicación a este caso constituye en mi opinión una ficción legal cuyo único objectivo es vincularme a actuaciones irregulares que nunca conocí y en las que aún menos participé.
Ni el Juez Instructor ni hoy la Sala dispone de nunguna prueba que me vincule a los hechos delictivos de los que se me acusa.
Es por todo ello que considero injustificada y falta de tota base jurídica la condena que es dicta contra mí en el marco de una Sentencia desmesurada.
Por todo ello he de considerar que la motivación de la Sentencia dictada por el Tribunal Supremo es, precisamente, la necesidad de condenarme para justificar así mi presencia en un proceso que ha durado más de seis años. No creo que haya ninguna otra razón que pueda explicarla.
Como demócrata, aún respetando la Sentencia, la pienso recurrir ante el Tribunal Constitucional. En todo caso, y desde este momento, pienso renunciar a mis cargos públicos de Diputado en el Parlament de Catalunya y de Senador en representación de éste. Creo contribuir así también, actuando de forma tan inmediata, a limitar el daño que esta Sentencia producirà a la imagen del Partido Socialista.
A lo largo de estos más de seis años, mi partido ha estado permanentemente al corriente de la evolución de este procedimiento judicial. He contado siempre con su apoyo, basado en la convicción de mi inocencia y en el conocimiento de que no he tenido nada que ver con los hechos juzgados.
En cualquier caso, he puesto en conocimiento de mi partido la Sentencia, vuelvo a poner, como siempre, mis cargos a su disposición, y he comunicado ya mi decisión de dimitir de los cargos de representación popular que ostento en su nombre.