ENTREVISTA Josep Maria Sala, ex senador, ex

diputado al Parlament y ex dirigente del PSC

 

"No soy la víctima de una persecución política"

 

RAMON SUÑÉ Barcelona

 

Sorprende encontrar a un hombre que apura sus últimas horas en libertad con

la entereza de Josep Maria Sala Grisó (Barcelona, 1945). El ex senador del

PSC, condenado a tres años de cárcel por su supuesta intervención en la

financiación irregular del PSOE, no quiere ser el chivo expiatorio de todos

los males cometidos por los partidos políticos, incluido el suyo, por el

simple hecho de que no se considera culpable. Su única preocupación es que

se corrija un "error" que, sin acritud, imputa únicamente a los magistrados

que le juzgaron, y, por tanto, evita presentarse como la víctima de una

persecución política urdida por el Gobierno.

--Cuál es su secreto para mantenerse entero y con un estado de ánimo en

apariencia tan positivo en circunstancias tan adversas?

--Mi inocencia y la convicción de que esa inocencia, finalmente, quedará

proclamada es lo que me aporta una gran fuerza moral. Cuando uno se siente

víctima de una injusticia, puede arrugarse ante ella o plantarle cara. Yo he

optado por lo segundo. Además, está el afecto de mucha gente del partido, de

la UGT, de entidades y asociaciones, y de gente de otros partidos. Mi estado

de ánimo no es de desesperación, sino todo lo contrario.

--Se siente víctima de una persecución política?

--No. Me siento víctima de un error judicial, un error suficientemente

documentado y que creo que podrá clarificarse en las instancias de recurso

que me quedan.

--Un error instigado por el Gobierno?

--No. Aunque no comparto su decisión, he de aceptar que los magistrados

dictaron sentencia en uso de su recto proceder. Otra cosa distinta es que a

lo largo del sumario han estado presentes de manera muy decisiva algunos

partidos políticos: Aznar y el PP, el señor Ruiz Mateos y todo lo que

representa. Pero creo que los jueces han actuado libremente.

--No cree que algunas críticas a la sentencia minan la credibilidad del

poder judicial y, en consecuencia, del sistema democrático?

--Hemos de saber separar la crítica a determinadas decisiones judiciales de

la construcción de un discurso que cuestiona la validez de la justicia y de

las personas que la imparten. A mí nadie me habrá oído pronunciar una sola

crítica personal a los magistrados.

--Tiene la impresión de haber sido condenado también por la opinión

pública?

--Creo que no. Una parte importante de la opinión pública sabe, como sé yo,

que soy inocente. Lo que hay es la sensación de una cierta hipocresía

colectiva del resto de los partidos. Se ha concentrado en el Partido

Socialista lo que han sido actuaciones de todos. Sin embargo, yo no me

siento el chivo expiatorio porque para ello tendría que haber hecho algo, y

yo no he hecho nada. Me hubiera gustado que todos los secretarios generales

se hubieran comportado como Joaquín Almunia y hubieran pedido disculpas a

los ciudadanos. Así los ciudadanos habrían recuperado una parte importante

de su confianza en los políticos.

--La sentencia de Filesa, aunque pueda ser revisada o corregida, marcará el

punto final a la carrera política de Josep Maria Sala?

--Espero que no. Espero que sea sólo un paréntesis de corta duración, un

punto y seguido, pero nunca un punto final. He tenido que dejar los cargos

públicos y orgánicos y lo he hecho sin vacilación. Pero espero, ya que soy

inocente, tener una reparación no sólo en el aspecto judicial, sino también

en el político. Sigo, como militante del PSC, vinculado a la vida política,

pero espero, además, poder dedicarme a ella con mayor intensidad y plenitud

cuando las cosas vuelvan a su sitio.

--El día en que presentó su renuncia como diputado en el Parlament, usted

prometió vol ver. Mantiene esa promesa?

--Creo que puedo mantenerla. Ese es mi objetivo porque mi meta es que mi

inocencia quede restablecida, mi honorabilidad reafirmada, y que este error

judicial quede compensado. Por eso, agotaré la vía de los recursos, y no

creo que tenga que utilizar la vía del indulto porque no es compatible con

esa voluntad de reafirmación de mi inocencia. Cuando esto suceda, la

consecuencia lógica será que ese paréntesis en mi actividad política se

cierre y que se abra una nueva fase que me permita trabajar por mis ideales

y por mi país.

--La imagen que quedará de este proceso será la de un importante dirigente

socialista entrando en la cárcel?

--No, porque después de esa imagen se producirá la imagen de la salida, y

estoy convencido de que no se producirá ningún nuevo ingreso en prisión. La

imagen que espero que quede es la de un inocente que ha sido restablecido en

su inocencia, de una persona víctima de una injusticia corregida. Entonces,

todas las demás imágenes quedarán borradas.

 

Copyright La Vanguardia 1997

 

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